
Una pausa, un descanso, unas vacaciones o como lo quieran llamar. Desde octubre próximo pasado esta columna no se actualizaba y la Fórmula 1 apenas daba de qué hablar.
El inicio de un nuevo campeonato de la Máxima Categoría obliga a esta servidor, a reiniciar las actividades que les corresponden, y así damos inicio:
Este pudiera ser el último GP de Australia que veamos en este legendario circuito de Albert Park, en la maravillosa ciudad de Melbourne. Según cuentan los más allegados al magnate de la F1, míster Bernie Ecclestone, éste pudiera estar poniéndole la soga al cuello a los organizadores del premio australiano para que realicen su próxima carrera en 2009 de noche, pero, tomando en cuenta los elevados costos que esto significa, los organizadores de la carrera han declinado en la petición del magnate, y prefieren —como se dice en el argot criollo— "echar tierrita".
No es falso que invertir en semejante complejo de iluminación para un circuito cuya longitud supera los 4 kilómetros, es un desembolso de millones de dólares. Hace poco pude ver el magnánimo esfuerzo económico, técnico y humano que realizaron en Qatar para realizar una carrera de Moto GP en la nocturnidad desértica del país árabe. Se gastaron más de 180 millones de dólares para que las condiciones de carrera nocturna se diferenciaran por poco de las diurnas. El equivalente a 70 estadios de fútbol fue lo que se instaló en iluminación en el trazado de Qatar. Si se colocara cada poste de iluminación usados en Qatar uno al lado del otro, la extensión llegaría desde el propio circuito hasta Moscú. (Vaya a Google Heart y saque la cuenta que acabo de nombrarle.)
Ahora bien, esto no justifica que los inversores del GP de Australia no quieran invertir en este magno proyecto, si bien las sumas por concepto de realización y producción de un GP de Fórmula 1 son tan sustanciosas como productivas. Entonces, ¿por qué dar un paso atrás en la propuesta de Ecclestone?
Algo muy parecido sucedió con el GP de Estados Unidos en Indianápolis. De un plumazo se eliminó esta carrera del calendario 2008, aclarando que las razones eran netamente económicas. Pero aunado a esto, está las malas relaciones que tiene Ecclestone con los dueños del trazado estadounidense. Entonces bien, Bernie ha mantenido a la Fórmula 1 en el sitial que le corresponde desde que tomó las riendas de esta organización por allá en la década del '70, hasta entonces la categoría ha ido de menos a más. Hoy en día se transmite cada Gran Premio a más de 120 países de manera simultánea; los equipos reciben mayores dividendos por la transmisión televisiva; hay un pujante auge de circuitos novedosos que quieren ser parte de la F1 cada año, tal es el caso de países como Rusia, Egipto y Singapur que han presentado sus proyectos para realizar carreras de Fórmula 1 en sus circuitos (todos nuevos de paquetes, por cierto). Y esto es el resultado del trabajo de Ecclestone y su siempre búsqueda de cosas nuevas que ofrecerle al público, que a fin de cuentas es quien paga todo esto.
Así las cosas, este pudiera ser entonces el último GP de Australia en la Fórmula 1 y, quizá, de querer organizar otro en suelo oceánico deberán recurrir al trazado de Adelhaida en Camboya o comenzar a rectificar como hicieron los dueños del Indianápilos Speed Racing que vieron lo importante que es mantener buenas relaciones con el magnate de la Fórmula 1.
A lo que vinimos
Nuevo año, caras conocidas y esperanzas por doquier. Eso es lo que se está viendo desde ya en Albert Park para el inicio de esta temporada 2008. Ya los Ferrari y los McLaren están dominando una vez más los ensayos libres. ¿Será esta una nueva rivalidad monopolizada por ambas escuderías y sus pilotos? O, ¿vendrá un Fernando Alonso a poner orden cuando Renault mejore sus prestaciones? Estas y muchas otras interrogantes encontrarán respuestas durante la realización de las 19 válidas que este año componen el calendario de la Fórmula 1. Por ahora, sólo queda especular con base en lo que las pruebas previas han dejado bien claro.
Ferrari y Raikkonen tienen la primera opción para llevarse una vez más el título este año. Hamilton será su principal rival en las primeras de cambio. El novel piloto contará con el apoyo —ahora sin enmascaramientos, si es que lo hubo alguna vez— de Ron Dennis, tomando en cuenta que sus intenciones de marcharse se esfumaron rápidamente. El equipo británico ahora más que nunca trabajará para su compatriota, tomando en cuenta que el papel de piloto número uno ahora sí es un hecho y que Kovalaine sólo ha venido a cumplir roles de escudero.
Por su parte, Alonso afronta un reto mucho mayor que el vivido en 2007 con McLaren. Su retorno a la escudería que le dio 2 títulos mundiales es el mejor ejemplo de "el buen hijo que siempre vuelve a casa". Pero, esta vez se encontró con una hogar menospreciado, tan poco competitivo este año que él mismo ha salido a declarar que será difícil luchar contra Hamilton y Raikkonen. ¡Fatal! No menos cierto es que ahora Alonso tendrá esforzarse el doble para lograr estar por detrás de McLaren y Ferrari, pues Williams y Red Bull han mejorado impresionantemente y sus pilotos tienen mejores prestaciones en sus monoplaza que el mismo español, y ni hablar de pretender ganar una carrera este año. Empero, Flavio Briatore, máximo dirigente deportivo de la casa francesa, apuesta por una mejora sustancial del vehículo una vez llegada la Fórmula 1 a Europa, es decir el GP de España en Catalunya. Hasta entonces, será simplemente tratar de sumar puntos y procurar ir lo más rápido que se pueda en carrera.
Agreguémosle a esta festival de cosas novedosas, la desaparición total de control de tracción, artilugio de amplio uso entre los pilotos para mantener a sus monoplaza pegados al asfalto. Ya sin esta ayuda el talento del piloto se hace imperativo, y la maniobravilidad y destreza imprescindibles a la hora de tomar las curvas, salir de ellas e, incluso, al momento de arrancar el carro. Se pudiera decir que este es un capítulo aparte que comienza a escribirse a partir del 16 de marzo, cuyo desenlace se llevará a cabo en noviembre y hasta entonces cada giro y cada acelerada será un párrafo más de esta vibrante telenovela.
Si la historia del año pasado se repite entre Ferrari y McLaren, entonces volveremos a tener un campeonato medianamente emocionante. Pero, si a este festín de puntos y victorias se les uno un renovado Fernando Alonso en su Renault, entonces sí será una temporada inolvidable.
A falta de apenas pocas horas para el inicio de esta nueva temporada, me atrevo a decir que esto se irá por la calle del medio, una calle ocupada por dos escuderías: Ferrari y McLaren; de resto sólo veremos eunucos intentos por parte de Williams y Renault de ocupar puestos en la llegada más abajo del segundo lugar, y tendiendo suerte —como siempre— intentarán ganar después del retiro del favorito por fallas o accidente. Por ahora, ¡que comience el show!