
Ya en Nurburgring las escuderías "grandes" habían dado luces de lo que traían para esta segunda mitad de la temporada. Ferrari mejoró un mundo al igual que McLaren-Mercedes, sobre todo en su paquete aerodinámico. Lograron estar a la altura de escuderías como Brawn GP y Red Bull, esta última demostrando lo que ya había asomado en 2008.
Esta carrera de Hungría fue algo atípica, si tomamos en cuenta los resultados previos de esta misma temporada. Hamilton señaló, meses atrás, que hasta que la escudería no le diera un vehículo competitivo sería muy difícil que ganara una carrera este año. Se lo dieron y lo hizo, pero en Nurburgring también lo tuvo, sólo que un error suyo lo dejó fuera de carrera. El circuito de Hungría se adaptaba a las prestaciones del McLaren. Era en esta carrera o las flechas de plata no ganarían una sola válida este año. El triunfo en Budapest les subió en ánimo y puso a la F1 en una etapa bastante interesante. Analisémoslo por partes:
Button y su sueño de ser campeón
Eso puede suceder, sigue de líder en el campeonato y su carro sigue siendo competitivo. Brawn aprovechará esta pausa que dan las vacaciones de agosto en la F1 para replantearse el último tramo de la temporada. Barrichello correrá para el piloto británico, de eso no hay duda. A falta de 7 válidas para el final es poco lo que puede aspirar el brasileño, a no ser que se cuele en una de ellas y obtenga la victoria, siempre y cuando Button no lo secunde.
Sus autos siguen siendo la novedad de la campaña, su inicio hará que vivan de las rentas y que se conformen con entrar en los puntos mientras que los sabuesos de Ferrari, McLaren y RedBull se reparten pedazos del mismo pastel. Pero no pueden descuidar a Vettel y Webber, jamás. Lo mejor que le pudo haber sucedido a Brawn es el retorno al podio de Ferrari y McLaren, sin duda.
El toro está rojo
Sebastian Vettel y Mark Webber son una dupla de armas tomar. No hay pilotos 1 y 2 dentro de RedBull, por el contrario dentro de la escudería de las alas lo que existe es una eterna pugna por saber quién puede ser mejor en la pista. Me recuerda la era Senna-Prost en McLaren por allá a finales de los `80. El resultado, cuando la situación es así, siempre es satisfactorio para los dueños y seguidores de la constructora. Vettel ha demostrado que Alemania sigue teniendo una digna representación en la Máxima Categoría luego de la partida de Schumacher. Webber, por el contrario, trata de delimitar su espacio lo que le ha causado un desgaste mental que pudiera verse reflejado en la pista más temprano que tarde. Sin embargo, los puntos lo ayudan a mantener su estatus dentro de la escudería.
No hay que perder de vista a esta dupla, no sólo este año, sino en los venideros. Vettel ha dejado boquiabiertos a propios y extraños con su manejo en pista húmeda y eso dice mucho de las condiciones de este piloto y de su adaptabilidad para conducir un Fórmula 1. Veo a Red Bull campeón de constructores este año.
Ferrari, una hija pródiga
Amenazó con irse, pero no lo hizo. Su peso dentro de la F1 es más que cierto y repercute en cualquiera de las deciciones que se tomen en torno a ella. Este año ha pasado a ser una más del montón cuando en otrora se jactaba de ser la pluricampeona mundial, la gallinita de los huevos de oro de Luca di Montesemolo. Pero este año ha visto cómo la dicha se puede ir de las manos como el agua. Empero, ha mejorado al igual que su sempiterno rival Mclaren, sin dudas. Pero ya es un poco tarde para que la escudería de Maranello retome lo que es suyo por mérito propio. Brawn y RedBull se lo arrebataron al inicio de temporada.
Lo que dificulta aún más que la escudería italiana retome el ritmo ganador de años atrás, es que Massa, su carta aval, ya no estará con ellos por lo que queda de temporada. El peso recaerá sobre Kimi Raikkonen, un triste campeón que poco o nada se le ha visto hacer esta temporada, más allá de su segundo lugar detrás de Hamilton. La pérdida de Massa será un duro hueso que deben roer dentro de Ferrari si quieren estar en los puntos antes de llegar a Abu Dhabi.
Las flechas no tan plateadas
Lewis Hamilton está por ser uno de esos campeones que la gente recordará sólo cuando lea los libros de historia. Este año estaba ensombrecido por su patética actuación, incluso rayando en lo novato al cometer errores que lo alejaron de un posible podio y —¿por qué no?— de una victoria antes de esta en Hungría. No hay que olvidar que el británico es un piloto consagrado de excelentes prestaciones, pero que sin un auto competitivo es difícil que vuelva por lo que es suyo. Ees tarde para pensar que Hamilton pudiera estar peleando por el campeonato, la ventaja es mucha y el tiempo es poco. Ya vendrá el 2010 para demostrar (tarde) que la McLaren pudo estar a la talla de las demás escuderías. Ahora, no hay que olvidar que lo mejor de las victorias de Hamilton son los brincos de excitada que da su novia, la modelo Nicole Scherzinger, cada vez que el británico hace algo bueno en la pista. Por mí que siga ganando.
Lo de Kovalainen es harina de otro costal. No creo que McLaren renueve su contrato para el 2010.
Alonso: el mejor y el peor
No hay piloto en la grilla de salida, actualmente, que tenga las condiciones que posee Fernando Alonso. Pero su desempeño este año dice otra cosa. Indudablemente su vehículo no lo ayuda, es cierto. Intentan mejorar, pero han avanzado poco. La alegría de Hungría luego de su Pole fue de tísico, cuando él mismo dijo que ganar era cuesta arriba. Era cuestión de tiempo para que Hamilton lo adelantara en plena carrera. Por "fortuna" la vergüenza no la pasó en pista. Los mecánicos se encargaron de ahorrarle el bochorno al dejar mal puesta la tuerca del neumático delantero derecho. Ese "detallito" les está costando su participación en el GP de Europa, a disputarse el 23 de agosto en Valencia, España. La condición de anfitrión de Fernando obliga a la escudería francesa a apelar esta decisión y a luchar porque la sanción se vuelva monetaria en vez de la prohibición de participación en la válida española.
No avisoro mejoras para Renault este año, más allá de las que ya ha mostrado hasta ahora.
Quedan 7 carreras para finalizar esta temporada, 4 ó 5 pilotos pudieran estar celebrando un campeonato en Abu Dhabi, o antes. Veo con muchas posibilidades a los pilotos de RedBull, que parecieran haber tomado un segundo aire. Quizá la fiesta se las agüe Ferrari o McLaren, si lo de las mejoras se mantiene así. Ésto podría ayudar a Brawn, porque mientras más sumen los del fondo más posibilidades tendrán de quedarse con el pastel. Amanecerá y veremos...